Veneactiva participó en el Simulacro Nacional Multipeligro 2023
Al sonar las alarmas, el personal abandonó las oficinas y se ubicó en un lugar seguro, como lo sugirieron las autoridades de Defensa Civil
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10 minutos antes del inicio del Simulacro Nacional Multipeligro, la asesora legal de la Clínica Jurídica Juan Germán Roscio, Raquel Montalván recordó al personal de la oficina administrativa de Veneactiva que faltaba poco tiempo poco tiempo para que iniciara la jornada convocada por el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci).
Montalván les explicó que es necesario tomar conciencia sobre lo útil que es estar preparado para terremotos porque Perú es un país con elevadas posibilidades de registrar sismos de gran magnitud y estar informado sobre cómo reaccionar puede salvar vidas. “Recuerdo que cuando tenía 15 años el terremoto de Pisco se sintió en el Callao y desde entonces participo en todas las actividades porque también hay que prepararse para un maremoto”, dijo la especialista.
Montalván les explicó que es necesario tomar conciencia sobre lo útil que es estar preparado para terremotos porque Perú es un país con elevadas posibilidades de registrar sismos de gran magnitud y estar informado sobre cómo reaccionar puede salvar vidas. “Recuerdo que cuando tenía 15 años el terremoto de Pisco se sintió en el Callao y desde entonces participo en todas las actividades porque también hay que prepararse para un maremoto”, dijo la especialista.
Fue así que al sonar las alarmas cada uno de los presentes dejó sus actividades y bajó por las escaleras para llegar a la avenida y ubicarse en un lugar seguro.
Entre ellos estaban Josuana Salas y su esposo Jesús Rivas, ambos ciudadanos venezolanos que asistieron a la cita presencial en la sede Miraflores, para recibir asesoría para el cambio de calidad migratoria y, cumpliendo el protocolo, se sumaron a la jornada.
Ellos manifestaron que por venir de un país donde con poca actividad sísmica, no manejan mucha información sobre cómo reaccionar en esos eventos.
La asesora legal Mariana Boscán, también de nacionalidad venezolana, rememoró lo difícil que fue enfrentar el primer sismo en Perú: “todos salimos y nos olvidamos las llaves. Fue un caos”. El simulacro le recordó la importancia de mantener la calma.
Pasados los 10 minutos, cada uno de los miembros de la organización regresaron a sus labores para seguir trabajando en beneficio de la comunidad migrante en Perú.
Sin embargo, Montalván recordó la necesidad de tener una mochila de emergencia para poder cubrir las primeras horas fuera del hogar en caso de un potente terremoto y sus respectivas réplicas.
