Al menos 30 mil venezolanos han cruzado la selva del Darién en el primer trimestre del año

Migración Panamá advierte del aumento de personas cruzando estos peligrosos caminos

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La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) alertan del preocupante incremento de personas que cruzan la jungla del Darién – la peligrosa selva que marca la frontera entre Panamá y Colombia – en búsqueda de protección y oportunidades, reseña la OIM en su portal digital.

De acuerdo a las cifras de las autoridades panameñas, se ha alcanzado el número récord de más de 100.000 personas cruzando el Darién, seis veces más que las que llegaron en el mismo periodo de 2022. Las autoridades estiman que, de continuar la tendencia, el año 2023 podría cerrar con el cruce de más de 400.000 personas.

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Panamá enfrenta una de las crisis de movimientos mixtos más desafiantes de la última década, como parte de un desplazamiento sin precedentes a través de las Américas. Luego de que 2022 fuese un año récord, en el que cerca de 250 mil personas refugiadas y migrantes arriesgaron sus vidas atravesando el Darién en busca de protección y mejores oportunidades, el primer trimestre de 2023 apunta a un aumento en el tránsito de personas por esta vía.

De acuerdo con las estadísticas del SNM hasta marzo del año en curso, las principales nacionalidades cruzando la selva del Darién son ciudadanos de Venezuela (30,250), Haití (23,640), Ecuador (14,327), además de personas procedentes de China (3,855), India (2,543), y los hijos de personas haitianas nacidos en Chile (2,499) y Brasil (2,072). Otras nacionalidades incluyen personas de Colombia, Afganistán, Camerún, Somalia y Perú, entre otros.

Los últimos informes mensuales de monitoreo del ACNUR y de la OIM reportan que las personas abandonan su país de origen frecuentemente con motivaciones económicas, incluyendo la falta de acceso a empleo. Más de la mitad de las personas también señalan haber huido de sus países debido a los niveles generales de inseguridad o amenazas, así como ataques específicos contra ellos y sus familiares.